¿Alguna vez te has preguntado a dónde se fue tu salario a fin de mes? Esta es una pregunta frecuente cuando se tienen problemas a la hora de administrar tus ingresos, y dinero en general.
Y la realidad es que a todos nos ha pasado, no da pánico revisar la cuenta bancaria para descubrir que los ingresos que percibimos ya no están; pagamos algunas cuentas y deudas, pero no entendemos qué sucedió con el resto.
La buena noticia es que esto tiene solución, y si te quedas leyendo hasta el final de este artículo te explicaré cómo. Si tomas las decisiones necesarias y construyes los hábitos financieros correctos, podrás dominar tu economía personalmente de forma fácil.
Cómo administrar mejor tus ingresos de forma automática
Antes de compartir contigo los trucos para administrar tus ingresos como los millonarios, debemos primero revisar tu mentalidad frente a las finanzas.
Tal y como te explico en el curso Domina tus Finanzas si no dominas el juego del dinero en tu mente, difícilmente lo harás cuando este llegue a tus manos.
Debes entender que el dinero es un resultado de tus pensamientos, de tu educación financiera y de cómo te relacionas con él; bien sea con una mentalidad de escasez o abundancia.
Por ejemplo, (y esto es algo que veo mucho) si tienes una mentalidad de escasez, aprovecharás cada descuento y vivirás pensando en centavos.
Cuando vives de esta manera, tiendes a convertir tu dinero en un recurso de bolsillo, el cual resulta fácil de gastar, difícil de hacer crecer y perezoso a la hora de trabajar para ti.
¿Y por qué es fácil gastar tu dinero con esta mentalidad?
- Cuando tenemos el dinero en la mano la mayoría de antojos se convierten en necesidades
- Gastar dinero de más en un restaurante lujoso no parece tan malo
- Irse de fiesta cada fin de semana parece una excelente alternativa
- Todos los comercios tienen promociones que no podemos dejar pasar
- Y encima de todo, contamos con dinero que no disponemos al 100%…
Ahora, si construyes una mentalidad de abundancia, observarás el dinero como un recurso para construir tu fortuna, aprenderás a ponerlo a trabajar para ti, y dejarás que este haga el trabajo duro por tu futuro financiero.
Entonces, para dejar de gastar innecesariamente tu dinero y tener un mejor control de gastos, a continuación te presentamos nueve trucos para administrar mejor tus ingresos, y consecuentemente, mejorar tus finanzas personales.
1. No ahorres lo que te sobre, gasta lo que te queda después de ahorrar
Lo primero que debes hacer para administrar tus ingresos como un millonario, y revertir esta situación es cambiar tu mentalidad de consumo.
Lo que solemos hacer la mayoría es, una vez recibimos el pago, salario o ingresos, pagamos deudas, compromisos, mantenemos nuestro estilo de vida (salir fines de semana, restaurantes, y compras innecesarias) y luego, si sobra algo, ahorrar dinero.
Ahí está el problema. Nunca sobra dinero para ahorrar, y el problema es que nos creemos unas de las mentiras más repetidas del mundo de las finanzas personales:
«Cuando gane más dinero, ahí si empiezo a ahorrar…»
Así que cambia la estrategia. Una vez recibas tu pago, automatiza tu cuenta para ahorrar un 15%, mínimo un 10% de tus ingresos.
Una vez cubras tus ahorros, es decir, tu futuro financiero, ahora sí puedes pensar en tu consumo inmediato.
2. Crea un presupuesto con tus gastos fijos
Cuando se tiene una buena planeación financiera, se vuelve mucho más sencillo administrar los ingresos.
Para esto es importante que aprendas cómo hacer un presupuesto personal, donde se incluyan los gastos fijos para mantener tu calidad de vida, tales como alimentación, servicios públicos, crédito hipotecario y demás.
Al igual que los ahorros, estos gastos son inamovibles, es decir, que debes cumplir con ellos cada mes. Entonces, una vez separes tus ahorros, destina un porcentaje de tus ingresos para cubrir estos gastos fijos.
Para que este presupuesto no te afecte tanto, lo puedes dividir en dos pagos (o aportes), los cuales haces en cada quincena de tu pago.
En la primera quincena pues pagar tu crédito hipotecario, tus cuentas de telefonía, y gimnasio; y en la segunda cubres la comida y otros gastos asociados.
3. No hagas más de cuatro retiros mensuales
Recuerda que la manera más fácil de gastarte el dinero en poniéndolo en tu bolsillo.
Literalmente convirtiéndolo en dinero de bolsillo; una vez lo tienes allí es muy fácil inventarte una excusa para gastártelo, y créeme que vas a encontrar una.
Además, no solo tendrás que cubrir comisiones bancarias por utilizar de manera frecuente los cajeros, sino que dejarás de percibir beneficios que obtienes por utilizar las tarjetas en establecimientos de comercio.
Desde algunos puntos de impuestos hasta descuentos en ciertos comercios, utilizar el dinero plástico trae beneficios interesantes. De esto se trata aprender a manejar tus tarjetas de crédito con inteligencia financiera.
En definitiva, para administrar mejor tus ingresos limítate cada mes a realizar máximo 4 retiros, y que estos sean la última opción que tengas a la mano.
4. Las tarjetas de crédito no deben financiar tus fiestas
Una de las mejores lecciones de finanzas que puedes llevarte de este artículo es que nunca te debes endeudar para una fiesta y mucho menos para unas vacaciones.
No gastes dinero que no tienes, en deudas que no te generan ingresos. Resulta fundamental que sepas diferenciar los tipos de deuda que existen.
Y mucho menos por medio de las tarjetas de crédito que tienen tasas de interés increíblemente altas.
Si realmente quieres mejorar tus finanzas hoy, no existe ninguna justificación que te haga endeudar con estos plásticos para pagar un gasto de esta índole.
5. Mantén siempre en tu bolsillo una reserva en efectivo
La liquidez es un concepto importante dentro un buen manejo de tus finanzas personales. Así que asegúrate de tener una reserva de efectivo.
Esto se debe a que los gastos imprevistos implican retiros, deudas o adelantos de tu tarjeta de crédito, lo cual termina afectando la salud de tu bolsillo.
¿Qué tipo de gastos imprevistos? Desde un taxi, el parqueadero, gastos en establecimientos que no reciben efectivo, hasta situaciones imprevistas como una enfermedad o un accidente.
Tener una buena educación financiera implica tener una «caja menor», la cual puede ser un porcentaje de tus ingresos y te permita cubrir gastos que no tenías dentro de tu presupuesto.
De igual manera, no malinterpretes tu definición de imprevisto con descuentos o compras emocionales de último momento.
6. Evita los gastos hormiga
Dicen que los millones se cuidan solos, que hay que ponerle atención a los centavos.
¿Cómo hacerlo? Evita esos gastos hormiga que parecen insignificantes, pero que están afectando considerablemente tus finanzas. Aquí tienes algunos ejemplos de estos gastos innecesarios que te impiden administrar tus ingresos.
- Cafés y lattes
- Galletas y snacks que podrías tener en casa
- Periódicos y revistas
- Aguas embotelladas
- Impresiones y fotocopias
- Recargas para tu teléfono celular
- Domicilios y comidas en restaurantes en semana
- Y todos aquellos gastos con los que eres permisivo, pero que te tienen sin saber a dónde va tu dinero a fin de mes.
Si evitas este tipo de gastos, y comienzas a ahorrar ese dinero extra, en cuestión de meses tendrás un capital interesante para colocar a trabajar el dinero para ti.
7. Ajusta tu estilo de vida al 70% de tu ingresos
Cuando sabes administrar tus ingresos, aprendes a limitar tus gastos al 70% y utilizar el 30% restando para tu crecimiento financiero.
Si bien puede ser una decisión difícil de aplicar, y más cuando tienes deudas y gastos, esto no significa que no se pueda realizar.
Utiliza este 30% de tu crecimiento financiero para ahorrar dinero, para comenzar a explorar alternativas de inversión como los bienes raíces, la bolsa de valores, o cualquier otro mecanismo de inversión con el que te sientas identificado.
8. Limita tus comidas en restaurantes
Cuando comes en un restaurantes que disfrutas de manera ocasional encuentras más placer que hacerlo de forma diaria.
Establece hábitos que sean coherentes con tus objetivos de finanzas.
Por ejemplo, puedes comer en un restaurante una o dos veces por semana, pues si esto se convierte en algo cotidiano, no solo se convertirá en rutina, sino que se afectarán tus finanzas.
Este punto está alineado con una de las reglas de oro de las finanzas, y es que debes establecer rutinas que faciliten la consecución de tus objetivos.
9. Comprar al por mayor aquello que consumes con frecuencia
Resulta mucho más rentable comprar en cantidad ciertos productos que consumes con frecuencia; desde la comida que no es perecedera y no pierde sus valores nutricionales hasta aquellos productos que compras para el hogar que irás consumiendo en el tiempo.
Esto funciona muy bien, pues sucede algunas veces que, cuando vamos supermercado por una bolsa de leche terminamos comprando cosas inútiles que no necesitamos y que están estratégicamente ubicadas para sacar nuestro dinero del bolsillo.
Una solución práctica es comprar al por mayor ciertos productos y alimentos, lo cual evitará compras innecesarias que hacen cuando vives ajustando tus compras en medio de la semana.
En conclusión, volvemos a lo mismo, si realmente quieres administrar mejor tus ingresos, la recomendación es que establezcas reglas o hábitos, como por ejemplo ir dos veces al supermercado por mes, y así evitar compras innecesarias o gastos que afectan poco a poco, sin darte cuenta, tu bolsillo.