Invertir en fondos indexados es una excelente estrategia para acercarte a tus objetivos financieros.
En lugar de dejar tu dinero estático en tu cuenta bancaria, asegúrate de hacer que crezca paulatinamente tras ejecutar estrategias de inversión que se ajusten a tus intereses financieros.
En la actualidad, es muy importante tener una buena relación con el dinero, lo cual parte por comprender cómo funciona, y sobre todo, por diversificar las fuentes que lo generan.
No importa que no tengas habilidades o una gran experticia como inversor, aun así tienes muchas oportunidades de mejorar tu calidad de vida si logras tomar buenas decisiones financieras.
Los fondos indexados y la inteligencia financiera
Aunque no lo creas, si estás decidido a vivir la vida de tus sueños necesitas invertir tiempo y esfuerzo en tu educación financiera, por ejemplo, con estos libros recomendados de criptomonedas.
Esto te permitirá entender mejor el mercado, descubrir qué tipo de inversionista eres, y en especial, identificar el tipo de inversiones que estás dispuesto a realizar para mejorar tu estatus financiero.
Hoy nos gustaría contarte el potencial que tienen los fondos indexados para acercarte a la vida de tus sueños: una que esté libre de deudas y que te permita disfrutar de tu dinero sin estrés ni dolores de cabeza.
¿Qué son los fondos indexados?
Los fondos indexados, también conocidos como fondos índice, hacen referencia a las inversiones de gestión pasiva, y por lo regular están conformados por instrumentos de renta variable.
La pasividad significa que los brókeres no intentan batir un índice de referencia a través de una determinada estrategia de selección y asignación de valores (en inglés esto se conoce como Asset Allocation).
No obstante, antes de profundizar en el tema, es necesario definir bien qué es un índice. En esencia, es un conjunto de activos referenciales que tienen la capacidad de definir el rumbo de un mercado.
Por ejemplo, el índice Standard & Poor’s 500 (S&P 500), o el IBEX 35 de España, tienen el poder de determinar sus respectivos mercados de manera irrestricta, aquí tienes sus precios actualizados:
Efectividad de estos fondos pasivos
En teoría, los índices bursátiles fueron creados para que los inversionistas no tengan que evaluar todos los activos que integran la bolsa de valores en las que se cotizan, buscando promediar tanto sus incrementos como sus caídas.
La idea es que las personas interesadas en negociar con este tipo de instrumentos financieros puedan utilizar las acciones que tienen una mayor relevancia en el mercado, para realizar una media ponderada de sus movimientos de forma más rápida y sencilla.
Sin duda, los fondos indexados tienen un alto grado de representatividad del conjunto del mercado. Por lo tanto, cuando alguien decide invertir en un índice, realmente está invirtiendo en un mercado en su conjunto.
De modo que si el comportamiento de dicho mercado es bueno, esto se reflejará en su índice y también en el nivel de rentabilidad de los fondos indexados.
Filosofía de los fondos indexados
Los fondos indexados atienden a una filosofía bastante lógica: Y es que no vale la pena luchar contra el mercado financiero, porque de por sí es muy eficiente; así que lo más sensato es seguirlo.
Los mayores defensores de estos índices reafirman que el mercado es imbatible, así que para ellos no tiene sentido que te ofusques en actuar en su contra.
Entonces, en caso de que te interese invertir en estos fondos de gestión pasiva debes tener claro que tu trabajo consistirá en replicar el comportamiento de un índice o mercado en particular.
En palabras sencillas, los fondos indexados te facilitan mucho las estrategias de trading, porque no tienes que estar buscando de manera constante y activa en cuál mercado o índice invertir.
Simplemente, deberás concentrarte en replicar el índice de referencia que esté mostrando el mejor comportamiento del mercado. En consecuencia, no deberás enfocarte en superar un índice referencial, sino en replicarlo de la mejor forma posible.
Cómo se diferencian de la gestión activa
La estrategia de inversión que se basa en la gestión activa es la más tradicional y conocida de todas.
En este caso, es obligatorio operar con ayuda de un fondo de inversión, puesto que sus gestores son los encargados de decidir cuáles son los activos ideales para integrar tu cartera.
Un punto para destacar es que las estrategias de gestión activa no pueden ser ejecutadas por ti mismo, y por ende, necesitas apoyarte en dichos fondos, o mejor dicho, en sus gestores quienes son los encargados de escoger los activos que podrían tener un mejor comportamiento a mediano o largo plazo.
Lo que buscan estos gestores es superar el nivel de rentabilidad media del mercado, lo cual amerita un gran conocimiento del mismo.
A través de un fondo de inversión de gestión activa puedes negociar la compra de los siguientes instrumentos financieros:
- Bonos
- Acciones
- Bienes inmuebles
- Materias primas
- Divisas
- Derivados y más
Gestión activa vs Gestión pasiva
La principal diferencia entre la estrategia de gestión activa y los fondos indexados consiste en que la primera de ellas no busca replicar movimientos ni índices.
Pero esto no es todo. La verdad es que existen muchos otros aspectos diferenciadores entre los fondos de gestión activa y los de gestión pasiva, tales como:
Protagonismo del gestor
La gestión activa amerita la actuación de uno o más gestores (estos se encargan de gestionar los fondos), mientras que en los fondos indexados el gestor no desempeña el rol protagónico.
Objetivo de inversión
Las inversiones en un fondo de gestión activa tienen un objetivo bien claro y definido: que los rendimientos sean mayores al mercado. Aunque como explica Tony Robbins en su libro Dinero, difícilmente estos fondos superan el mercado a largo plazo.
Por su parte, el objetivo de invertir en fondos de gestión pasiva se centra en replicar el índice al cual está indexado.
Por ejemplo, si el índice indexado es el S&P 500, y este sube en un 10%, pues el fondo también debería subir en un 10%. En contraparte, si el índice sufre un descenso del 5%, lógicamente el fondo también debería bajar en un 5%
Las comisiones
Los fondos de gestión activa suelen tener comisiones muy elevadas, mientras que los fondos indexados no tienen problemas en minimizar los costes de gestión.
Esto es posible gracias a que los analistas no se encargan de analizar las acciones o el mercado para determinar cuándo es un buen momento para invertir, es decir, no se realiza un análisis fundamental de inversión.
También es factible reducir los gastos afines a cada transacción, así que en definitiva, confiar en una estrategia de inversión que se base en la gestión pasiva es menos costoso.
Modalidad de inversión
Para explicarte mejor este aspecto nos gustaría compartirte un pequeño y simple ejemplo:
Supongamos que deseas invertir en el famoso índice S&P 500 –uno de los más importantes de la bolsa de valores de los Estados Unidos ya que engloba a las 500 mejores compañías del país-.
La lectura que se le haría esto sería la siguiente: tu estarías intentando replicar este índice tras comprarle acciones a las 500 empresas que lo conforman, y no solo esto, sino que lo estarías haciendo en una misma proporción.
Esta estrategia perseguiría un objetivo claro: obtener la misma rentabilidad que ofrece el índice S&P 500. Esto significa que no estarías interesado en obtener una menor o mayor rentabilidad, sino en igualarla.
En cambio, si te inclinas por una estrategia de gestión activa lo más probable es que tu fondo de inversión se asegurará de invertir en aquellas empresas que integran el S&P 500, capaces de ofrecerte una mayor rentabilidad en el futuro.
Ventajas de invertir en este tipo de fondos
En el 2017, el reconocido bróker de fondos español, Indexa Capital, elaboró un estudio sobre las mayores gestoras de fondos en España y sus conclusiones fueron bastante interesantes.
En efecto, la investigación arrojó que los inversionistas tenían mayores probabilidades de incrementar su rentabilidad, de haber invertido en fondos indexados, entre el 2006 y el 2015.
De hecho, hubiesen podido superar la media anual del 2.80%, de haber confiado en esta estrategia de inversión pasiva durante ese período de tiempo.
Es innegable que las inversiones en fondos indexados tienen varias ventajas importantes. Por eso a continuación te las presentaremos a detalle:
- No estás obligado a comprar valores individualmente, y ni siquiera en la misma proporción. Esto le aporta más comodidad y efectividad al proceso de inversión.
- Estudios han demostrado que las inversiones de gestión pasiva son más favorables a largo plazo –Para muestra la enorme evolución que ha experimentado el S&P 500 desde finales de los 70’s-
- Las comisiones son inferiores. En el caso de la gestión activa tienden a ser altas ya que el trabajo que supone la compra-venta de activos, la realización de cálculos, los análisis del mercado, e inclusive, los ajustes en el portafolio de inversión, es extenuante.
- Para comenzar a invertir pasivamente solo deberás enfocarte en construir una cartera de inversión lo suficientemente eficiente como para que replique al índice con éxito, a la par de hacer los reajustes necesarios cada cierto tiempo.
- Los fondos indexados admiten cambios de mercado. Es decir, que si operas en las bolsas extranjeras, pero de pronto te gustaría operar en Wall Street, podrías traspasar tus participaciones de un fondo a otro tras realizar una exención fiscal.
- Los fondos indexados te ofrecen un amplio margen de diversificación. Imagina que decides invertir en un fondo que replica un índice con alcance mundial: en este caso la diversificación geográfica sería plena.
Los fondos indexados, una opción rentable y confiable
Es innegable que los fondos indexados representan una excelente oportunidad para incrementar tus ingresos en el largo plazo.
Son rentables, confiables, y la verdad es que pueden mejorar tu estatus financiero significativamente, siempre y cuando te asegures de tomar las decisiones correctas como inversionista.